Mejorar la calidad del resultado
Puede mejorar la calidad del resultado modificando o desactivando algunas características del programa que no son esenciales para su flujo de trabajo.
Puede realizar cualquiera de las siguientes acciones:
Desactive el Procesamiento de imágenes de trama (RIP) e imprimir sobre la marcha, de forma que el procesamiento y la impresión de trabajos no se lleven a cabo simultáneamente.
Aumente la resolución RIP.
Corrija de la longitud de los trabajos impresos.
Simule impresión en grabado, flexografía o impresión offset.
Simule las condiciones de luz adecuadas.
Suavice los degradados.
Calibre correctamente la impresora. Algunas impresoras tienen una función de calibración interna que se puede activar desde la pestaña Configuración de impresora y flujo de trabajo.
Utilice un papel de alta calidad adecuado para el trabajo. Por ejemplo, utilice papel fotográfico para obtener una impresión intensa de imágenes fotográficas y utilice un papel para pruebas para trabajos de pruebas para trabajos de pruebas CMYK.
Asegúrese de que selecciona perfiles y destinos de reproducción adecuados para su trabajo.
Vuelva a calibrar la impresora. Con la recalibración se ajustan las densidades de la tinta a las de la impresora de referencia en la que se creó el perfil de papel. La recalibración contribuye a garantizar que las propiedades de reproducción del color de la impresora se mantienen constantes.
Optimice el perfil de papel para obtener los mejores resultados de color posibles.
Para verificar los trabajos con el estado Fallo de verificación realice una optimización específica del trabajo. Este proceso optimiza la gestión del color del trabajo al crear un perfil de corrección que se ajusta mejor a la gama de colores del perfil de simulación.
Utilice Color Editor para optimizar un color plano. Si no queda satisfecho con la calidad de color en la impresión de un color plano, puede cambiarla midiendo una representación de color más fiel en otra impresión.
Forzar el uso de tinta negra pura para eliminar las tintas CMY y obtener así un negro más saturado.
Eliminar las impurezas de color que se pueden darse en la gestión del color durante la conversión de RGB a CMYK.
Realice ajustes de color modificando el porcentaje de tinta de los canales de tinta individuales.